Desayuno Carmen Argibay Molina

Agosto 7, 2012

El desayuno con las « Mariannes » realizado el 7 de julio de 2011 en la Embajada de
Francia contó, en esta ocasión, con la presencia de la Jueza de la Corte Suprema de Justicia
de la Nación (CSJN), Carmen María Argibay, por invitación del señor embajador  Jean-Pierre Asvazadourian. Durante toda su exposición, Argibay destacó con especial énfasis el rol de la
mujer en nuestra sociedad actual.

Estudiante de derecho durante la « Revolución Libertadora » que derrocó al General Perón, la Sra. Argibay contó que la decisión con respecto a su carrera se debió a su ferviente rechazo
a las injusticias. A su vez, especializarse en Derecho Penal la obligó a enfrentarse a constantes
discriminaciones en su desempeño como alumna y, más adelante, como mujer profesional.
Su feminismo, sin embargo, no se sostiene únicamente a través del discurso, sino también
por el constante desarrollo de organismos y organizaciones en defensa de los derechos de
la mujer. En el año 2009 creó la Oficina de la Mujer, de la cual es responsable. A su vez, la
Oficina de Violencia Doméstica ubicada en las cercanías del Palacio de Justicia por iniciativa
de la Corte Suprema, se encuentra también dirigida por una mujer, la vice presidenta de la
CSJN, Ministra Elena Highton de Nolasco.

La Oficina de la Mujer busca desarrollar un sistema de capacitación con perspectiva de
género en la justicia. En razón de este objetivo, se hizo un relevamiento en los organismos
judiciales del país para realizar un “mapa de género” de la justicia en la Argentina. Dicho
relevamiento permitió ver que más del 50% de las personas trabajando en tribunales de todo
el territorio nacional son mujeres. Sin embargo, analizando de forma más precisa la pirámide
judicial, a medida que las competencias y las responsabilidades aumentan, el número de
mujeres encargadas de tales puestos disminuye, ilustrando de este modo una disproporción de
género en altos cargos.

Por otra parte, esta oficina firmó recientemente un acuerdo de cooperación con la
Procuración General de la Nación para llevar a cabo acciones conjuntas destinadas a abordar
correctamente desde la justicia todos los procesos vinculados a la trata de personas y a la
explotación sexual de la mujer. A su vez, la Oficina de la Mujer aspira a firmar un acuerdo con
el Ministerio de Seguridad para extender su influencia a todas las fuerzas bajo su dependencia,
buscando así formar a oficiales de la Policía Federal y de Gendarmería en estos temas.
Por último, y como respuesta a una de las preguntas realizadas, la Sra. Argibay hizo
mención del retraso en el nombramiento de jueces, explicando que existen falencias cercanas
al 30%. En respuesta a tal situación, explicó que el Poder Judicial decidió realizar reclamos
tanto al Consejo de la Magistratura -por no llamar a concursos- como al Poder Ejecutivo.
La referencia que realizó la jueza con respecto al marco jurídico argentino fue sumamente
favorable, destacando que la aplicación práctica de la ley es tan importante como el marco
mismo. Finalmente, reafirmó la independencia del Poder Judicial en relación al Ejecutivo,
marcando una clara diferencia con la situación existente en los años 1990. La Sra. Argibay
hizo especial hincapié en el control por parte del Poder Judicial sobre los otros dos poderes,
destacando que ese es el objetivo principal del mismo.